Los pangermanistas y los nazis tenían unos libros sagrados a los que consideraban "proféticos". En las próximas semanas hablaremos de algunos de ellos.La profecía del monje Hermann
La profecía consta de unas serie de manuscristos recopilados desde 1240, pero que no fueron publicados abiertamente hasta 1723, ya que en ellos se criticaba a los Hohenzollern, en especial a Guillermo II. En seguida se hicieron varias reediciones en los años 1725, 1740 y 1758. Los alemanes no dudaron de la veracidad de las profecías y Gullermo I, tras ser proclamado como emperador en Versalles tras la derrota de los franceses en 1871, se atribuyó alguna de las profecías del libro. El libro de las profecías recibiría una revisión en 1891 de la mano del abate Florent Dumas, que incluyó dos nuevos textos, los Augurios de Fiensberg y la Profecía de Maguncia.El texto original está escrito en latín. En las profecías el monje describe algunas ideas antisemitas y pangermánicas.Por sólo citar algunos textos señalamos la parte última:"Por fin el cetro está en manos de quien será el último de esta lista real (En este texto se hace referencia a Gullermo II).""Israel se propone un crimen execrable, que sólo la muerte puede expiar."
Los alemanes creían en el poder de las profecías de este libro y los nazis lo siguieron a al pie de la letra.
Mario Escobar
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario